Mi experiencia

Quisiera que este espacio, fuera un poco el espacio de todos aquellos que se sientan identificados de alguna manera, con la emfermedad del cancer. Ya sea porque la han tenido ellos, o alguien conocido.
Animense, les espero.
Un saludo

domingo, 8 de febrero de 2009

Comienza la lucha...


A los 20 días de la operación, empecé el tratamiento, (el oncólogo me dijo que era importante empezar lo antes posible, después de la operación).
Primero me tocaba la quimioterapia.
El primer día, es como cuando vas al cole por primera vez, no conoces a nadie, no tienes ni idea de como va aquello, cuanto tiempo vas ha estar con el gotero puesto, que reacciones hará tu cuerpo, que ambiente se respirara durante las sesiones, te influirá sicológicamente el ver otros pacientes de cáncer reincidentes. Son algunas de las dudas, que te vienen a la cabeza, cuando llegas el primer día de tratamiento y estas esperando en la sala, a que digan tu nombre, para entrar.
Luego cuando entras, se te van disipando las dudas.
El personal sanitario, es de lo mas humano, te tratan con cariño y cuidado. Pienso que los que están en estas salas, tienen una sensibilidad especial y la verdad, es que los pacientes lo agradecen un montón.
Te sientas en el sillón que ha dejado libre, una persona que por hoy ya ha tomado "su dosis" de quimio, y se va, despidiendose con un "hasta el próximo día" . Adiós guapa, que tengas buen día" le contestan las enfermeras.
Allí sentada, mientras esperas que vengas a ponerte tu tratamiento, vas mirando, al resto de personas que están haciendo su sesión, las observas y ellas a ti, hoy son desconocidas, pero el próximo día ya no lo serán, vamos en el mismo barco, estamos luchando por una misma causa, derrotar al cáncer. Como en toda batalla, habrá ganadores y vencidos, pero no se lo pondremos fácil, lucharemos con todas nuestras fuerzas y sacaremos recursos de donde haga falta, no estamos solos, tenemos el apoyo incondicional de nuestros familiares y amigos, la medicina y los médicos, harán también su trabajo. Los que pierdan la batalla, lo harán con la cabeza bien alta, con el orgullo de haber luchado hasta el final...
Las siguientes sesiones, ya vas mas "tranquila" conoces al resto de personas, intentas poner un poco de humor y bromeas cuando te traen la bandeja, con tu tratamiento, esas bolsas envueltas en papel de aluminio, "son bocadillos" de jamón ibérico, (se dice en tono irónico)y hay que comérselos todos y luego cuando ya están puestos en el palo y van bajando por el tubo conectado a tus venas, como algunos son de diferente color, pues entonces, bromeas con que es bebida de diferente sabor...
También hay días malos, en que las nauseas, no te dejan en paz y tan solo el olor a comida ya te dan arcadas...
A medida que pasan los días, el organismo esta mas débil y las venas "se quejan", se vuelven mas sensibles a la química.
Pero el animo, no decae, y se intenta animar unos a otros, "ya falta un día menos para terminar el tratamiento".
A los 2 meses y medio, de estar haciendo quimio, el oncólogo me dijo que tenia que empezar ya con la radioterapia.
Así que vuelta a empezar, sitio nuevo, gente nueva...
La doctora de radioterapia, también una profesional excepcional, me trato con cuidado y mimo en todo momento.
Las sesiones fueron bien, aunque están un poco mas molestas que las de quimio. Por las radiaciones, la piel se quema un poco. Aunque tuve suerte, pues mi piel es muy blanca, pero aguanto bastante mejor de lo que pensábamos..
A diferencia de la quimio, la radioterapia la hice diariamente y el cuerpo lo acuso bastante, me notaba que me faltaban las fuerzas, subir escaleras era misión casi imposible (bueno esto aun hoy, me cuesta un poco) aunque no tuve que interrumpir ninguna sesión y pude acabar el tratamiento en el tiempo que me habían marcado.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Todo esto me es tan familiar!.
Es tan importante luchar con la confianza de ganar este combate!.
Un abrazo a todos los luchadores y luchadoras que en este momento de sus vidas, pasan por esta experiencia.
Ánimos y coraje.

Rita dijo...

Si, es muy familiar lo que cuentas, mi cuñada está pasando ahora por eso y lo está pasando muy mal, todos lo pasamos mal y todos esperamos que valga la pena este sufrimiento, a veces la veo tan decaida, tan sin fuerzas que me parece que no va por buen camino, pero viendo lo que cuentas me vuelve la esperanza, un abrazo

baldufina dijo...

El tratamiento, te deja hecha una piltrafilla, pero hay que hacerlo, es la unica manera de luchar contra la enfermedad y de intentar ganarle la partida al cancer.
Un abrazo lleno de energia para tu cuñada y otro para ti Rita.
Hasta siempre.